Azul (Buenos Aires) (AICA):
El obispo Miguel Esteban Hesayne, fundador del Instituto Cristífero,
invitó a los católicos a reconocer a la luz de la fe cristiana las
palabras, gestos y actitudes del Santo Padre, y afirmó que, de alguna
manera, “Jesús nos habla hoy por hoy a través del papa Francisco”. El
obispo indicó, además, que tomar el nombre de san Francisco de Asís
“muestra que la renovación de la Iglesia comienza por la transformación
de cada uno, asumiendo los criterios de Jesús y las actitudes
evangélicas en el accionar personal”.
“Si todos somos iguales en dignidad, todos somos corresponsables del ser y misión de la Iglesia", dijo.
Monseñor Miguel Esteban Hesayne, obispo y fundador del Instituto
Cristífero, invitó a los católicos a reconocer a la luz de la fe
cristiana las palabras, gestos y actitudes del Santo Padre, y afirmó
que, de alguna manera, “Jesús nos habla hoy por hoy a través del papa
Francisco”.
“Es actualmente, como lo fue Simón Pedro en su momento, el Pastor
máximo para guiar a su Iglesia –reconoció sobre Francisco-. Esta es la
razón para estar atentos a las actitudes y palabras del Papa”.
Monseñor Hesayne destacó los gestos del romano pontífice al asomarse
en la logia de la basílica de San Pedro, que resumió en su orar con el
pueblo, la elección del nombre Francisco y el pedido de la bendición de
los fieles. El prelado indicó que invocar a Jesús para obrar conforme a
su Evangelio, como lo hizo el Papa aquel 13 de marzo, “es ser santo, es
convertirse a Jesús y a su Evangelio”.
El obispo indicó, además, que tomar el nombre de san Francisco de
Asís “muestra que la renovación de la Iglesia comienza por la
transformación de cada uno, asumiendo los criterios de Jesús y las
actitudes evangélicas en el accionar personal”.
“Francisco pidió que la Iglesia lo bendijera a él antes de bendecir
él a la Iglesia. Con esta actitud dio una profunda lección de teología
sobre la Iglesia: todos somos iguales en un solo cuerpo,
diferenciándonos en diversos servicios”, explicó.
“Si todos somos iguales en dignidad, todos somos corresponsables del
ser y misión de la Iglesia. Todos somos discípulos, testigos,
misioneros para anunciar que Jesús es el Señor de la Iglesia y de la
Historia”, concluyó.+
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